Mamá se muere, dijo Dios. Vinieron tropas, más de mil.
Los puentes cruzan el dolor, los ojos se visten de hollín.
Por más que llore el corazón a lo lejos se ve el gris…
Despídete de este calor, el infierno ya está aquí…
Mamá se muere dije yo, los bosques dan este placer…
La paradoja del motor. Papel para calmar mi sed.
Estigmas que rompen con la razón, desiertos que traen la desolación.
Volverás a ver que somos inertes ante la fiebre sin curación.
Agujeros a favor de quién nos vio crecer… conscientes del error.
Le robamos el color, el verde de su piel… y sin pedir perdón.
No borraré las huellas, con el pulgar le dimos la razón.
No corromper la esfera y respirar su pulmón.
Agujeros a favor de quién nos vio crecer… conscientes del error.
Le robamos el color, el verde de su piel… y sin pedir perdón.
Nos envía su señal…los terremotos traen silencio, tras la destrucción.
Hoy los pájaros se van…el cielo les promete paz, la que abajo faltó.
Enseñamos la maldad, los niños ya no tienen voz quieren a mamá.
Nos envía su señal… hoy los pájaros se van…
Agujeros a favor de quién nos vio crecer… conscientes del error.
Le robamos el color, el verde de su piel… y sin pedir perdón.
Agujeros a favor de quién nos vio crecer… conscientes del error.
Le robamos el color, el verde de su piel… y sin pedir perdón.
Todas las letras son idea original de Roberto Muñoz para Stereogénea.
Las letras de Roberto Muñoz están bajo una licencia Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported.
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